Glenda León Campo de juego en BIENALSUR Arabia Saudita
3 de septiembre 2025

La artista cubana (La Habana, 1976) presentará su obra Campo de juego en BIENALSUR, una plataforma global donde su práctica conecta lo cotidiano con lo espiritual y lo universal.
BIENALSUR: una red global de arte contemporáneo
BIENALSUR nació en Argentina como un proyecto que rompe con la centralización del arte y propone diálogos interculturales a través de una red de sedes distribuidas en distintos países. Más que una bienal tradicional, es un mapa indisciplinado que conecta geografías, comunidades y prácticas artísticas. En su cuarta edición, la bienal se extiende a más de 70 ciudades en 28 países, consolidándose como una de las plataformas más vastas y descentralizadas del mundo del arte contemporáneo.
Su llegada a Arabia Saudita cobra un sentido especial: el Saudi Arabia Museum of Contemporary Art (SAMOCA), el primer museo de arte contemporáneo del país, abrirá sus puertas en Riad en el marco de esta bienal. Allí se presentará la exposición Let’s Play, curada por Diana Wechsler, con sedes paralelas en el MNAD (Madrid) y en el propio SAMOCA. En este contexto se inscribe la instalación de Glenda León, que será uno de los puntos destacados de la muestra.
Campo de juego: la intimidad como lugar de contemplación
En Campo de juego, Glenda León convierte un colchón —símbolo de descanso, vulnerabilidad y silencio— en una superficie cargada de significados sensoriales y espirituales. Al trasladar este objeto cotidiano al espacio museístico, la artista propone una paradoja: lo banal se vuelve poético, lo privado se transforma en experiencia colectiva.
El colchón, asociado a lo íntimo, se vuelve aquí un terreno fértil para la introspección. La instalación invita a detenerse y repensar la dimensión espiritual de los objetos que habitan nuestra vida diaria. Frente al ritmo acelerado de lo contemporáneo, la obra sugiere una pausa, un espacio de contemplación compartida en el que lo doméstico adquiere una densidad simbólica inesperada.
Entre lo personal y lo universal
La trayectoria de Glenda León se distingue por la capacidad de situarse en el umbral entre lo visible y lo invisible, entre lo íntimo y lo colectivo. Su práctica se nutre de la experimentación formal, de la escucha y de la percepción sensorial, generando un lenguaje que trasciende la contemplación pasiva.
León articula un repertorio interdisciplinario que combina su vocación empírica con una investigación mística contemporánea. Así, construye un campo donde lo efímero y lo eterno entran en tensión, y donde lo cotidiano se convierte en vehículo de reflexión existencial. Sus obras, que invitan a participar más que a mirar, desplazan al espectador hacia una experiencia estética y espiritual.
Un puente sensorial en Arabia Saudita
La presencia de León en Let’s Play dentro de BIENALSUR reafirma el poder de su obra como puente sensorial y cultural. En un país donde el arte contemporáneo apenas comienza a abrir espacios institucionales, Campo de juego simboliza una invitación a explorar lo íntimo como un territorio universal.
La curaduría de Diana Wechsler plantea un diálogo entre artistas de distintas geografías, y en ese marco, la obra de León resalta por la sencillez de su gesto y la profundidad de su propuesta. Convertir un colchón en un campo de meditación colectiva es, a la vez, un acto de resistencia contra la banalización del objeto y una apuesta por recuperar lo esencial.
Let's Play: un proyecto curatorial expandido
La exposición Let’s Play se presenta simultáneamente en el MNAD de Madrid y en el SAMOCA de Riad, con obras que reflexionan sobre el juego, la memoria y la capacidad del arte de abrir nuevas percepciones. Para el espacio saudí, el equipo curatorial seleccionó especialmente la instalación de León, subrayando su potencial para generar un ambiente de introspección y pausa dentro de un contexto social y cultural en transformación.
La inauguración del SAMOCA marca un hito histórico: se trata del primer museo de arte contemporáneo en Arabia Saudita, ubicado en el barrio de JAX, una zona industrial que hoy vive un proceso de revitalización cultural. Allí, Campo de juego se integrará en un relato que busca traspasar los límites del espacio museístico e irradiar hacia el entorno urbano.
Lo cotidiano como universal
En la obra de Glenda León, lo cotidiano nunca es trivial. Sus propuestas convierten gestos simples en metáforas de la existencia. El colchón de Campo de juego no es solo un objeto doméstico: es un recordatorio de la fragilidad, del descanso necesario, del tránsito entre conciencia y sueño. Al situarlo en el espacio público de una bienal global, la artista lo convierte en un espejo colectivo de nuestras experiencias más íntimas.
En Arabia Saudita, esta propuesta adquiere una fuerza particular, pues no solo dialoga con un público local, sino que abre un espacio compartido para la memoria y la contemplación. Lo que parecía privado se vuelve común; lo individual se transforma en universal.