Glenda León
En su práctica como artista multimedial, Glenda León incorpora un repertorio de técnicas y materiales que se nutren de la experimentación y su formación multidisciplinaria. León desafía la percepción del receptor de su obra mediante vínculos que hacen visibles -y a la vez contradicen- las leyes naturales. Le interesan los intersticios entre lo visible y lo invisible, entre el sonido y el silencio, entre lo efímero y lo eterno.
Su cuerpo de trabajo surge a partir de la fusión entre su vocación empírica y una investigación mística contemporánea, que sitúa su obra entre el racionalismo -en su significado más amplio- y la espiritualidad.
León enfatiza en el acto de la escucha como si se tratara de un paso necesario para continuar creciendo en el proceso evolutivo. La danza, la coreografía y la música profundizan su comprensión de un “todo” en donde habitan mente, cuerpo, espacio, sonido y silencio. De allí que sus obras presenten un cambio de enfoque de la realidad y del tiempo, que hablen de experiencias místicas a través de elementos sensoriales y que presenten la desintegración del yo a través de la imagen.
“Como la magia, el arte es un acto de transformación, que en ocasiones se traduce en un simple hacer coincidir”, precisa León.